La climatización mediante bomba de calor es la climatizacion más eficiente que existe, sólo superada por la geotérmica, que se basa en la bomba de calor.
La climatización mediante bombas de calor* es la climatización más eficiente que existe, y con diferencia. De cada unidad de energía que consume, produce hasta cuatro.
¿ Y cómo es posible esta maravilla de la técnica ? Pues aprovechando las leyes de la termodinámica. La bomba de calor mueve el calor de un lugar a otro, como lo hace la bomba hidraúlica con el agua. De esta forma, podemos absorber el calor allí donde está, y conducirlo allí donde nos conviene.
Las bombas de calor puede usarse sólo para el aire acoondicionado, sólo para la calefacción, o para la climatización integral de la casa, incluyendo la producción de agua caliente.
La bomba de calor consta normalmente de dos partes, como los aparatos de aire acondicionado, que por cierto, también son bombas de calor. Una de las partes se encuentra allí donde a nosotros nos conviene, nuestra sala, por ejemplo. La otra parte, tiene salida al exterior de la casa. Cuando queremos aire acondicionado, movemos el calor hacia afuera, y el aire caliente es expulsado al exterior. Cuando queremos calefacción, la bomba es capaz de absorber calor del exterior hasta una temperatura de varios grados bajo cero, momento en el que deja de ser altamente eficiente.
Ambas partes, unidad externa e interna, están conectadas mediante un sistema hidráulico parecido al de la calefacción central. Es decir, hay una tubería con un líquido en su interior. Y ahora comienzan las diferencias con los sistemas de calefacción mediante caldera: paretiendo de la premisa de que los cambios de estado -sólido, líquido y gaseoso- producen calor, que es lo que nos dice la física, convertimos ese líquido interno en un gas de forma mecánica, sin consumir energía. Simplemente conviertiendo el tubo en más ancho. Naturalmente, se trata de un líquido especial.
Cuando ya es un gas, lo conducimos allí donde está el calor; el gas absorbe ese calor, y mediante un motorcillo denominado compresor, -que es el dispositivo para el que necesitamos la electricidad- se comprime el gas. Cuando un gas es comprimido, cambia de estado, y al cambiar de estado, cede el calor que ha absorbido.
Es entonces cuando inyectamos el calor allí donde nos conviene: en la unidad externa, la que da a la calle, si lo que queremos es refrigerar; la inyectamos en la unidad interna, la del salón de casa, si lo que queremos es calefactar.
La bomba de calor continúa absorbiendo calor mientras resulta necesario.
La eficiencia de las bombas de calor sólo es superada por la climatización geotérmica, que se basa en el uso de bombas de calor; la diferencia es que, en lugar de realizar ese intercambio de calor con el aire de la calle, lo hace con el subsuelo, que tiene una temperatura homogénea a lo largo de todo el año: unos 15ºC. Es más sencillo obtener calor a partir de esta temperatura que de los 10ºC o menos que hay en la calle en invierno. Así mismo, en verano, el subsuelo y sus 15ºC son un recurso mucho más fresco que los 30 grados o más que hay en la calle.
Si es usted técnico, verá que estamos denominando a veces bomba de calor a aquello que no lo es. Este site intenta divulgar la eficiencia energética y los dispositivos eficientes de climatización, por lo que no queremos entrar en detalles técnicos que puedan aburrir al público; nos basta con que comprendan los mecanismos que hacen funcionar a los sistemas más eficientes, independientemente de que se llamen bomba de calor, enfriadora u otros términos técnicos que van más allá de los objetivos de estos textos.
